Publicado en el editorial de mayo-junio de la revista www.eleconomista.net


En un artículo reciente* (mayo, 2024), Danny Quah, profesor de la Escuela de Política Pública Lee Kuan Yew de la Universidad Nacional de Singapur, planteó que ocho de las nueve economías más exitosas del mundo son de países pequeños. Excluyendo a Estados Unidos de las nueve más exitosas, el promedio de población es de 4.2 millones de habitantes, y la más grande de las ocho que son pequeñas, es Suiza, con una población de 8.5 millones. En este grupo se encuentran también Luxemburgo, Noruega y Singapur.

Esto no implica que son exitosas porque son pequeñas, pues hay muchas economías pequeñas que son pobres, pero sí implica que, la mayoría de los países más ricos, medidos por el PIB per cápita son economías pequeñas, y que, por tanto, eso no es un obstáculo para ser exitosa.

Este hecho cuestiona algunas de las ideas que se mencionan como requisitos para que una economía progrese, como lo son, que sea una economía grande, para aprovechar las economías de escala, y que lo que importa es la complejidad de productos. Si bien esto es válido en economías grandes, para las economías pequeñas, más que la complejidad de productos, lo que se correlaciona con el avance tecnológico es el comercio.

En este sentido, el análisis también cuestiona la hipótesis que las exportaciones son el motor de estas economías, ya que, si se correlaciona las exportaciones con el total de comercio, exportaciones más importaciones, la correlación es casi uno a uno, por lo que no se puede establecer si son las exportaciones o la apertura al comercio global lo que determina si un país es exitoso o no.

Otro hallazgo interesante, es que la correlación entre la apertura al comercio total per cápita y la riqueza relativa de un país es importante. La relación se da en el sentido que entre más abierto es un país, medido según su comercio per cápita, el PIB per cápita es más grande. Aquí el ejemplo más claro es China, ya que su comercio per cápita es bajísimo, comparado con el de Singapur, que es cincuenta veces más grande que el de China, al comparar en términos per cápita. Y aquí se puede percibir que es Singapur el que se encuentra entre los más rico, y no China.

El mensaje planteado es que un país pequeño puede ser exitoso, que para ser exitoso debe estar abierto el comercio internacional, especialmente si es pequeño, porque es poco lo que se puede producir, y mucho lo que se necesita consumir, y que, para estimular el cambio tecnológico, la apertura a la economía global es importante.

*: Export-led Growth’: The Trade-Technology Relation in Small and Poor Economies