El congreso de alimentos y bebidas abordó las tendencias tecnológicas que están dando forma a la manera de producir alimentos.


El programa de Innovación Tecnológica (PROINNOVA) de FUSADES, celebró la edición 2024 del congreso de alimentos y bebidas Food Innovation (Food.i). Este es un espacio en el que se comparten reflexiones en innovación, tecnología y tendencias para dicha industria. El evento contó con el apoyo del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), a través de la Secretaría Técnica del Financiamiento Externo (SETEFE).

El congreso Food.i 2024, denominado “Tecnología en los alimentos del futuro”, enfocó las ponencias en la influencia que diferentes desarrollos tecnológicos ya tienen en la manera de producir y consumir los alimentos en el mundo.  Esto para fomentar el aprovechamiento de dichas innovaciones en la industria salvadoreña y la creación de nuevos negocios.

“Siempre hemos sido entusiastas con nuestras metas, fomentando la adopción de tecnología en las empresas y la innovación en la industria salvadoreña. Con nuestro trabajo hemos coadyuvado para que la sociedad visualice al emprendimiento como una oportunidad real y un motor para la creación de empleo y crecimiento de la economía”, expresó el presidente de FUSADES, Juan Daniel Alemán, durante la inauguración del Food.i 2024.

Con este evento, PROINNOVA busca mantener actualizado el conocimiento sobre la industria de alimentos y que esa información permita a los empresarios identificar oportunidades de negocio.  “El Food.i siempre ha sido el centro donde se puede conocer las tendencias, la innovación y esa ventana hacia el futuro y hacia el mercado”, dijo el director de PROINNOVA, Samuel Salazar. 

Para lograr ese objetivo, las ponencias abordaron nuevas tendencias como el uso de inteligencia artificial, para identificar tendencias, hacer eficientes los procesos y elaborar nuevos productos; también la edición genética para elaborar alimentos con beneficios a la salud o crear productos equivalentes para los diferentes tipos de consumidores; generación de contenidos para redes digitales, así como novedades que entrarán al mercado en 2025.

Además, se trató el tema de la innovación como algo transversal que se debe implementar dentro de las empresas. Esto con las ponencias sobre modelos de innovación, gestión de investigación y desarrollo, innovación en el desarrollo de productos, entre otros.

Las conferencias se impartieron por un panel de siete expositores, con trayectoria en diferentes áreas.  Ellos fueron:

  • Alejandro Osses, gerente del Centro Regional de Estudios en Alimentos Saludables, CREAS (Chile).
  • Eduardo Umaña, especialista en tecnologías de alimentos de PROINNOVA.
  • Flor de Mendoza, directora del Laboratorio de FUSADES.
  • Gabriel Hidalgo, director de Asceleración (Chile).
  • María Laura Ávila, gerente de investigación y desarrollo de Puratos (Costa Rica).
  • Rafael Vega, especialista en biotecnología.
  • Rodolfo Salazar, especialista en transformación digital y fundador de Qudox.

El Food.i también fue un espacio para cultivar redes de trabajo y hacer negocios. En la feria tecnológica estuvieron presentes proveedores de equipo industrial, materia prima e insumos, así como emprendedores y empresas con productos innovadores. Entre ellos, iniciativas para cultivar hongos comestibles con calidad gourmet, chocolates enfocados al cuidado de la mujer, productos orgánicos, platillos para dietas sanas, entre otros. 

Compromiso con el emprendimiento

El Food.i 2024 también fue ocasión para reconocer a importantes aliados de PROINNOVA, como lo son el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) y la Secretaría Técnica del Financiamiento Externo (SETEFE). 

Al inicio del evento se entregaron placas de reconocimiento a la consejera agrícola regional de USDA, Marcela Rondón y la directora de proyectos de SETEFE, Patricia Jiménez.  

Con el apoyo de USDA, a través de SETEFE, PROINNOVA ha ejecutado dos proyectos que buscan fortalecer la capacidad tecnológica de la agroindustria salvadoreña y las pequeñas empresas. Esto se ha traducido, desde 2014, en asistencias técnicas, capacitaciones, entrega de equipo tecnológico y lanzamiento de nuevos productos por parte de los beneficiados.