FUSADES y distintas instituciones de la sociedad civil, hemos recibido del actual gobierno y de algunos diputados en la Asamblea Legislativa, la amenaza de cierre bajo especulaciones y acusaciones totalmente falsas. La Fundación no es, no ha sido, ni será enemigo de ningún gobierno; no es ni ha sido, ni será una oposición partidaria para nadie. Pero sí hemos sido, somos y seremos una fuente de pensamiento libre, que cuestiona y aboga por la democracia e institucionalidad del país.
En este momento El Salvador está ante un grave retroceso a una serie de libertades individuales, pero, sobre todo, a la reducción del espacio cívico. Se están estigmatizando voces que piensan diferente y lo que se persigue es lograr consolidar el pensamiento único.
En este contexto, se han incrementado los ataques a entidades como la nuestra. FUSADES, por casi cuatro décadas, ha propiciado el desarrollo económico y social, por medio del estudio y análisis técnico-científico de la realidad. A todos los gobiernos electos, desde que existe la fundación, se les han presentado propuestas de políticas públicas, se ha aportado a fomentar el debate y con ello ha contribuido a generar discusión dinamizante con todos los sectores políticos, económicos y sociales del país.
FUSADES y distintas instituciones de la sociedad civil, hemos recibido del actual gobierno y de algunos diputados en la Asamblea Legislativa, la amenaza de cierre bajo especulaciones y acusaciones totalmente falsas. Por lo anterior, llamamos la atención de los salvadoreños y la comunidad internacional sobre este proceso progresivo y permanente, cuyo objetivo es callar voces, análisis y opiniones disidentes; un evidente ataque a las organizaciones para socavar su credibilidad. Con el ánimo de lograr división, se pretende enfrentarlas con la población, cuando lo que se busca es la libre discusión de las ideas y, con ello, canalizar el pensamiento y buscar mejores formas de hacer las cosas. En una democracia saludable es natural el disenso, y el pensamiento crítico no debe ser considerado como amenaza. ¿Hacia dónde vamos en El Salvador?
El Salvador es suscriptor de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, la Declaración Universal de los Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. En ese contexto, es importante destacar que el principio 5 de la Declaración de Principios sobre la Libertad de Expresión de la CIDH dispone que “la censura previa, interferencia o presión directa o indirecta sobre cualquier expresión, opinión o información difundida a través de cualquier medio de comunicación oral, escrito, artístico, visual o electrónico, debe estar prohibida por la ley. Las restricciones en la circulación libre de ideas y opiniones, como así también la imposición arbitraria de información y la creación de obstáculos al libre flujo informativo, violan el derecho a la libertad de expresión.” El Gobierno, de conformidad con la Constitución y los tratados internacionales de derechos humanos ratificados por el país, está obligado a respetar y velar porque estos derechos se mantengan. Atacar, denigrar o calificar con desmedro nuestro trabajo, es violar esos compromisos.
Hacemos un llamado al Relator Especial de Naciones Unidas sobre los Derechos a la Libertad de Reunión Pacífica y Asociación, Clément Nyaletsossi Voule, para que le dé seguimiento y esté atento a las acciones y amenazas al derecho de asociación que se están observando en El Salvador.
FUSADES no es, no ha sido, ni será enemigo de ningún gobierno; no es ni ha sido, ni será una oposición partidaria para nadie. Pero sí hemos sido, somos y seremos una fuente de pensamiento libre, que cuestiona y aboga por la democracia e institucionalidad del país.
Los salvadoreños tenemos derecho a la paz interna y a vivir en armonía social, en donde se respeten las libertades individuales. No se puede continuar promoviendo la confrontación, el odio, la venganza y la división y mucho menos el acoso, el hostigamiento y la persecución de la sociedad civil que exige el respeto de las reglas de la democracia.
Antiguo Cuscatlán, 20 de agosto de 2021.