La vigencia de CAFTA constituye una fase fundamental para aprovechar las ventajas que conlleva el establecimiento de una zona de libre comercio entre siete países con los que existe un importante intercambio comercial. Este tratado claramente tiene un impacto en la relación comercial que El Salvador tendrá con Estados Unidos y se amplía el marco comercial frente al otro instrumento que rige el comercio a nivel multilateral a través de la Organización Mundial de Comercio (OMC).