El proyecto de presupuesto 2021 (PP2021), entregado a finales de septiembre de 2020 por el Órgano Ejecutivo a la Asamblea Legislativa (AL), presentaba una serie de fallas que lo convirtieron en el peor proyecto en varios años1. Se esperaba que la discusión en la Asamblea Legislativa corrigiera o atenuara estas falencias, y que el sistema de contrapesos funcionara para que el presupuesto: a) cumpliera con el marco jurídico, b) preservara el equilibrio macroeconómico, y c) se enfocara en el desarrollo sostenible e inclusivo, y la lucha contra el COVID-19; sin embargo, ninguno de estos propósitos se logró.

  • Carolina Alas de Franco