La economía salvadoreña comienza a mostrar un menor ritmo de crecimiento, con datos a agosto, dejando el efecto rebote que caracterizó el primer semestre del año. Existe un conjunto de factores que debilitan la economía; por una parte, la confianza de los consumidores y empresarios cayó en los últimos cinco meses; también el indicador de ventas muestra una disminución. Por el lado del consumidor, está siendo afectado por una inflación mayor que ha debilitado el poder de compra y pareciera que se mantendrá alta hasta el cierre del año. Las exportaciones y remesas han perdido velocidad en los últimos meses, y las importaciones aumentan de precio por el incremento en las materias primas y el encarecimiento de los fletes de transporte marítimo.

  • Pedro Argumedo Matamoros
  • Manuel Antonio Zuleta Morataya