La política Crecer Juntos reconoce múltiples necesidades en torno a la primera infancia y plantea un abordaje integral e intersectorial. Esta tiene tres préstamos externos aprobados y raticados para su ejecución, los cuales suman US$575 millones: dos de ellos del Banco Mundial, por US$250 millones cada uno, y uno del Banco Interamericano de Desarrollo por US$100 millones, de los cuales US$75 millones contribuyen al desarrollo infantil temprano (DIT).